Agregan wifi a la muñeca Barbie, que tendrá acceso a la privacidad de niñas y niños

La muñeca podrá recolectar  los datos personales de su dueña o dueño, con los riesgos que eso implica. 

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La empresa de juguetes infantiles Mattel, gran dominadora del sector durante el siglo XX, lleva unos años encadenando pérdidas multimillonarias, en gran parte porque su juguete estrella, la muñeca Barbie (y sus complementos), ya no registra los increíbles números de venta de hace unas décadas. No es de extrañar por tanto que la firma norteamericana haya decidido darle una vuelta al modelo, introduciendo cambios revolucionarios.

Sin duda alguna lo más destacable es el intento de dotar de inteligencia a la muñeca. ¿Cómo pretenden hacerlo? El nuevo modelo, que se lanzará en Estados Unidos a final de año, estará permanentemente conectado a wifi, con lo que tendrá acceso a Internet. Bautizada como Hello Barbie, esta muñeca será una especie de ‘Siri’ para niñas y niños.

Pese a que estará programada para no ofrecer determinados tipos de respuestas y los fabricantes aseguran que la privacidad de las conversaciones está garantizada, surge un debate sobre los riesgos que entraman los juguetes conectados. Los dispositivos tendrán acceso a la privacidad de sus dueñas y dueños y recogerán un gran número de datos personales y de geolocalización, con los riesgos que todo ello conlleva.

ProtonMail, el servicio de correo electrónico que protege la privacidad

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De un tiempo a esta parte han surgido muchas opciones de correos electrónicos con un alto nivel de encriptación para proteger la privacidad de las y los usuarios. CERN (Organización Europea para la Investigación Nuclear), a través de estudiantes del MIT y Harvard, puso en marcha hace unos meses ProtonMail, una servicio de correo electrónico que que utiliza una forma de cifrado extremo, lo que hace que espiar los mensajes sea realmente complicado.

ProtonMail usa dos contraseñas. Una, para ingresar a la cuenta, enviada  al sitio. La otra, la que sirve para descifrar los mensajes, se queda en nuestro ordenadores. A través de este sistema, ni siquiera los administradores de ProtonMail pueden conocer el contenido de los textos.

El servicio incorpora más funciones para proteger la privacidad como la expiración de mensajes enviados (son borrados del email del receptor), así como la garantía de que los metadatos no se guardan.

A todo esto hay que añadirle que ProtonMail está alojado en Suiza, por lo que todos los datos están protegido por la Ley Federal Suiza de Protección de Datos (APD) y la Ordenanza de Protección de Datos Federal suizo (DPO), la más estricta del mundo. Esto ofrece una de los mayores niveles de seguridad y sólo podrían entregar acceso a las cuentas con una orden judicial del Tribunal Cantonal de Ginebra o el Tribunal Supremo Federal de Suiza.

Punto y final a la privacidad en la web profunda

Deep web

Se conoce como Internet profunda o ‘Deep Web’ a todo el contenido de Internet que no forma parte del Internet superficial, es decir, de las páginas indexadas por las redes de los motores de búsqueda de la red. Páginas protegidas con contraseñas, documentos en formatos no indexables, sites directamente bloqueados por su contenido… Para hacernos una idea, Google, Yahoo o Bing apenas son capaces de indexar el 5% de lo que hay en Internet, dejando el restante 95% en la web profunda.

Esta red, además de mantener en secreto toda la información que se envía, no revela la dirección IP de los emisarios, por lo que hace prácticamente imposible rastrear nada de lo que se gesta a través de ella. Un lugar idóneo para la práctica de conductas ilegales (hay mitos de todo tipo en torno a la web profunda) que podría sufrir un importante revés en su manera de funcionar.

Todo por culpa del Pentágono, que lleva años intentando crear un sistema para hacerse con los datos de los usuarios de la Internet profunda y por fin parece haberlo encontrado. Un buscador avanzado que permite a las agencias secretas revelar cualquier información de los usuarios y los movimientos que tienen lugar en el segmento oculto de Internet.

Desarrollado por cerca de 20 grupos de investigación de empresas privadas y universidades, el sistema ha sido desarrollado para las necesidades de las agencias de inteligencia con el fin de descubrir a los individuos involucrados en prácticas ilegales.